El trato con nuestro perro tiene que ser siempre cariñoso pero firme

Los perros son animales gregarios que consideran la familia como una extensión de su manada de perros. Por lo tanto, si permitimos al perro convertirse en el “jefe”, con el tiempo tendrá un carácter dominante y podría llegar a dar problemas a los miembros de la familia con su comportamiento.

Por lo tanto, en los primeros momentos de convivencia con nuestra mascota, es vital enfatizar en la posición social inferior del perro en el entorno familiar. Algunas reglas a seguir para conseguir un correcto status son las siguientes:

1. No alimentar a nuestro perro hasta que nosotros no hayamos comido: los “perros jefe" comen primero.
2. Juguemos con él pero debemos asegurarnos de que ganamos: los “perros jefe” siempre ganan.
3. Asegurémonos de que nuestro perro nos deja pasar antes de atravesar las puertas: los “perros jefe" pasan primero.

Estas y multitud de sutiles técnicas de refuerzo harán que nuestro perro compruebe que los humanos son los “perros jefe” de la “manada”. Recordemos: el trato siempre cariñoso pero firme.